NO ARRANCAMOS:
La
semana anterior hice referencia a que estamos en los últimos días de la famosa
“cuesta de Enero” y que parece ser que nos está siendo difícil llegar a la
cima; tal parece que estuviésemos inmersos en la ya lejana “tortura de Sísifo”
condenado por los dioses, de por vida a subir, empujándola, una piedra muy
grande cuasi redonda hasta la cima de una montaña; cuando Sísifo casi concluía
la tarea, la piedra se le resbalaba o se le escurría de las manos y retornaba
al pie de la montaña y vuelta de nuevo a emprender la tarea; y así, una y otra
vez; han pasado los años, un siglo tras
otro y Sísifo aún sigue empujando la piedra…
Las tareas
del Gobierno Central y de muchas de las municipalidades del País no arrancan o
han tenido tropiezos serios en algunos de sus niveles; tomemos como ejemplo el Ministerio de
Comunicaciones en donde no se ha podido iniciar un trabajo serio porque, según
expresó la persona nombrada, solo le avisaron con 48 horas de anticipación que
ocuparía el cargo del cual tuvo que renunciar a los pocos días, principalmente
por problemas de índole tributario con la SAT y no tanto por haber sido muchos
años contratista del Estado.
Siguen
los señalamientos en contra de otros funcionarios y eso, supuestamente, impide
que los planes en esas dependencias que dirigen, arranquen y se detengan lo
cual repercute en la lentitud del trabajo que debiera ejecutarse con toda la
celeridad que cada caso amerita.
En
el plano municipal, principalmente en aquellas jurisdicciones en donde se
produjo, por cuestiones electorales, un cambio marcado en los Concejos del
municipio, es otro cantar; en un porcentaje mínimo de municipalidades han
llegado personajes de mucho peso y conocimientos profundos en el manejo de la
cosa municipal; en esos afortunados municipios, lejos de haber problemas, se
nota el cambio positivo desde el mismo momento de la toma de posesión; se debe
a que el Alcalde electo es “todo un señor” y a que tiene colaboradores que no
solo lo rodean sino que lo apoyan decididamente.
En
estas Alcaldías no se escuchan los gritos de las plañideras llorando y
quejándose de lo que, supuestamente, hicieron o dejaron de hacer los alcaldes
salientes porque los que ingresaron sí tienen planes, sí tienen estrategias
para hacerlos funcionar y sí tienen conocimientos en la materia; bien
aventurados los vecinos que sí supieron elegir; dichosos los que votaron
conscientemente y no se dejaron llevar por los espejitos que les regalaron.
En
el otro lado de la medalla nos encontramos con algo peor que le “tortura de
Sísifo”; aquellas municipalidades que cayeron, por decisión equivocada de un
sector de los empadronados, en manos de políticos que nada saben al respecto
del manejo adecuado de una municipalidad y que además, están rodeados de
políticos necios y ambiciosos que, desde ahora, ya manifestaron su enfermiza
avidez de “llegar al poder” dentro de cuatro años; y lo peor, ya comenzaron a
promocionarse a costa del municipio. ¡Aliviados estamos!
En
otros casos, quienes llegaron electos (algunos por minorías evidentes y con un
porcentaje abrumador de falta de apoyo) no “arrancan”, (pretextando cosas absurdas) porque algún
sindicato laboral emplazó a la municipalidad y ellos se ven impedidos, por ley,
de colocar a quienes les deben favores económico-políticos; no entiendo por qué
no han iniciado el trabajo municipal cuando tienen gente, en muchos casos
profesional y honorablemente capacitada para desarrollar sus planes de trabajo,
si es que los tienen. No puede ser que, caprichosamente, solo inicien su
trabajo con “su gente” que, obviamente, tampoco conoce la labor a realizar.
¿Qué les pasa? Ya comenzaron a defraudar el pueblo que les paga por no hacer
nada.
Y
lo que aquí exponemos es apenas “un botón de muestra”.
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